Crece la leyenda de Allyson Felix en los Juegos Olímpicos
| Redacción Marca Claro
Si el nombre de Allyson Felix ya estaba en la inmortalidad del atletismo, su actuación en los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020 la pone en un sitio casi inalcanzable. La velocista norteamericana sumó un oro más a su carrera al subir al podio en la prueba de los relevos 4×400 metros y con ello logró la undécima medalla olímpica de su carrera.
Ninguna otra mujer ha alcanzado tal cantidad de medallas en el atletismo, con su bronce en Tokyo 2020, el día de ayer, Allyson dejó atrás a la jamaicana Marlene Ottey quien ostentaba la marca de nueve preseas, ahora posee once.
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Esta medalla tiene un sabor especial para la estadounidense, fuera de las pistas se vio obligada a enfrentar varias batallas como un embarazo de alto riesgo que puso en peligro su vida y la de su bebé, la disputa con uno de sus patrocinadores y también el enfrentarse a la competencia en sí con rivales que cada vez complican más el panorama.
Por todo esto, los 400 metros en Tokyo 2020 en los que ganó bronce el día de ayer, tenían un gran significado, el ganar o perder no era lo importante, salir a la pista y volver a sentir la emoción de la velocidad era el mejor motivo: “No tengo miedo de perder. Pierdo mucho más de lo que gano. Así es la vida y así es cómo debe ser”, publicó Allyson a través de sus redes sociales.
Con once medallas conseguidas en los Juegos Olímpicos, ganada la última en la final del relevo 4×400 este sábado, Allyson Felix entró a la historia como la atleta con más medallas en la disciplina de atletismo, dejando atrás a otra leyenda como Carl Lewis, quien ganó 10 metales en su paso por los olímpicos, 9 de oro y una plata.
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