Un triunfo en honor a su abuelo, fallecido el pasado noviembre, es la meta que se ha propuesto la esquiadora estadounidense Lindsey Vonn, campeona olímpica en 2010 y dos veces oro mundial en esquí alpino.
Durante una conferencia de prensa ofrecida en PyeongChang, dijo que la partida de su abuelo Don Kildow, a quien ha señalado como el responsable de practicar esquí alpino, es su motivación para ganar medalla de oro en alguna de las pruebas que disputará en estos Juegos Olímpicos: descenso, súper gigante y combinada alpina.
Vonn, de 33 años, confirmó que seguirá un año más en la alta competencia debido a que, con 81 triunfos en la Copa del Mundo, buscará el récord de 86 victorias que posee el sueco Ingemar Stenmark.