Es difícil que una persona gane una medalla en unos Juegos Olímpicos de Invierno. Son cientos de miles los que lo intentan, pero se quedan en el camino. Ahora, que en una sola familia haya más de un medallista, eso es algo extraordinario.
Tina Weirather pertenece a un linaje de grandes atletas invernales. La atleta que pertenece a uno de los países más pequeños del mundo (Liechtenstein) ganó medalla de bronce en el Esquí Alpino en la modalidad de Super-G. Con esto, suma otra medalla más en esta disciplina que parece darse muy bien en su nación.
Liechtenstein tiene 10 medallas en total en justas invernales. Siete de esas preseas pertenecen a la familia Weirather. Su madre, Hannah Wenzel, es cuatro veces ganadora de presea. Mientras, su tío, Andreas Wenzel, tiene dos medallas olímpicas en su vitrina de trofeos.
Por si fuera poco, Tina por fin pudo cumplir con las expectativa. Desde Turín los resultados se le habían negado. Entre caídas, malos resultados y lesiones jamás había logrado un puesto positivo. Fue hasta ahora, en PyeongChang 2018 que se unió a su familia como la mejor en este evento.
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